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Descubre el secreto para hacer una deliciosa pizza casera con masa esponjosa y tus ingredientes favoritos en minutos

Prepara una deliciosa pizza casera con masa esponjosa y salsa fresca, perfecta para compartir momentos en familia u ofrecer a tus invitados. ¡Descubre la receta!

La pizza casera se ha convertido en una opción muy popular para compartir en familia o con amigos, y preparar una deliciosa pizza en casa nunca ha sido tan fácil. Con una masa esponjosa y una rica salsa de tomate natural, puedes crear una experiencia culinaria única que satisfará los paladares de todos en la mesa.

Ingredientemente clave para la masa perfecta

Para lograr una pizza de calidad, la elección de los ingredientes es fundamental. A continuación, te presentamos lo que necesitas para preparar la base de la pizza y su salsa:

  • 1/2 kilo de harina de trigo
  • 1 1/4 taza de agua
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cucharadita de levadura
  • 1 cucharadita de azúcar rubia
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 cucharadas de MAGGI® La Rojita
  • 6 tomates
  • 1 cebolla

A estos ingredientes se les pueden añadir otros como jamón de pavo, champiñones, aceitunas y queso mozzarella, que darán un toque especial y personal a tu pizza. Estos ingredientes son perfectos para alegrar cualquier reunión familiar o de amigos.

Preparando la masa y la salsa de tomate

Una vez que tengas todos los ingredientes, comienza la preparación siguiendo estos pasos:

  1. Disolver la levadura y el azúcar en un cuarto de taza de agua tibia y dejar reposar 10 minutos. Coloca la harina en un bowl y ve agregando la levadura reposada y el resto del agua. Agrega el aceite de oliva y la sal, mezclando hasta obtener una masa homogénea. Amasa hasta formar una bola y déjala reposar en un lugar cálido, cubierta, durante 20 minutos.
  2. Después del reposo, divide la masa en cuatro partes iguales y forma bolas. Estira cada bola con las manos hasta obtener la base de la pizza y déjalas reposar sobre una superficie enharinada durante 15 minutos más.
  3. Para la salsa, corta la cebolla en cubos grandes y los tomates sin semillas. En una olla, calienta una cucharada de aceite y sofríe la cebolla. Agrega las dos cucharadas de MAGGI® La Rojita, media taza de agua y los tomates troceados. Cocina por cinco minutos, luego licúa la mezcla y deja enfriar.

Con la salsa lista y la masa reposada, es momento de armar las pizzas. Cubrir la base de cada pizza con la salsa de tomate y añadir el queso mozzarella. Finalmente, distribuye los toppings: pimiento, champiñones, jamón, aceitunas y cebolla.

Coloca las pizzas en una bandeja para hornear y llévalas al horno precalentado a 170 °C durante 12 a 15 minutos o hasta que los bordes estén dorados. Esta es una forma sencilla de disfrutar en casa un plato lleno de sabor y creatividad.

Si bien el tiempo de preparación y cocción puede variar, el resultado final siempre es gratificante. Al preparar tu propia pizza, no solo personalizas cada ingrediente, sino que también creas un espacio de unión familiar donde disfrutar de momentos inolvidables. Así que, ¡manos a la obra y a disfrutar de tu pizza casera!


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